pátzcuaro, mich.

a una hora al sur de morelia está el pueblo mágico de pátzcuaro. los camiones p'urhépecha salen directo casi cada media hora; el boleto no está a más de $40.

el centro histórico está muy bien preservado y cuenta con un número de facilidades que hacen la visita del turista qua turista muy grata. personalmente, creo que se debería de replicar en el resto de los pueblos mágicos del país el modelo de los carteles informativos y entretenidos que acompañan a cada lugar de interés. estos cartelones explican en forma breve, y con un lenguaje y tono inclusivos, la historia de cierta construcción vecina, su estructura y funcionalidad, y una leyenda relacionada a esta.

son de especial interés la basílica de la virgen de la salud, la casa de los once patios y los alrededores de la plaza vasco de quiroga.

la virgen de la salud, matrona de la ciudad, es una figura de pasta de maíz que se tiene en mucha estima en esta ciudad; en su basílica descansan los restos del humanista y benefactor vasco de quiroga, de quien se tiene también una muy buena impresión en la región. la casa de los once patios es un bello ex-convento que ahora sirve de taller y mercado de finas artesanías. la plaza vasco de quiroga es una gran plaza rodeada por casonas y edificios "majestuosos;" en su interior se monta con frecuencia el tradicional baile de los viejitos durante las temporadas altas.

según los hoteleros patzcuareños, en temporadas altas hay que reservar cuartos desde mes y medio antes, si se planea visitar en semana santa, o hasta cuatro meses antes, si se pretende visitar en día de muertos. lo cierto es que en las cercanías del centro histórico de pátzcuaro resulta difícil (a mi me resultó imposible) hallar cuarto por menos de $100.

la tarde del viernes santo tiene lugar la procesión con los cristos. en esta procesión, representantes de cada barrio portan en silencio los cristos de cada parroquia partiendo desde la basílica de la virgen de la salud. en la foto superior, un niño cargando una vela guía a un sacerdote. a la izquierda, miembros de una congregación pasean a su cristo.